Un hombre que iba a ser deportado a su país de origen logró evadir a las autoridades tras pedir ir al baño en el aeropuerto y escapando del lugar sin ser visto.
De acuerdo con Sun-Times Media Wire, Radu Anghel regresaría a Rumania pero su vuelo primero hizo una escala en el aeropuerto internacional O’Hare, en Chicago.
El sujeto de 32 años pidió permiso para ir al baño y aprovechó que no tenía supervisión para huir del lugar sin ser perseguido, incluso pasando junto a los dos agentes de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) que lo custodiaban.
Imágenes de seguridad captadas el 10 de junio muestran al hombre alejándose de los oficiales tras visitar el sanitario y pidiendo un taxi al exterior de la terminal. Las autoridades incluso instalaron un perímetro para evitar su escape, pero este ya había ocurrido.
Según Nina Pruneda, vocera de ICE, Anghel entró a los Estados Unidos de forma ilegal apenas unos meses después de haber sido deportado. El hombre fue arrestado en febrero y entregado a la agencia, que lo deportó a Rumania por abusar de su visa temporal de trabajador.
Sin embargo, este fue arrestado nuevamente el 10 de mayo cerca de Roma, Texas, y entregado otra vez a ICE en Laredo, donde permaneció un mes en espera de su deportación.
Se desconoce si los agentes de ICE en cuestión enfrentarán alguna sanción, y tampoco se sabe si el prófugo estaba esposado cuando escapó.